Escudriñando mi computador encontré muchos cuentos cortos que escribía en momentos de ocio o de necesidad de desahogo, los iré subiendo esporadicamente.
Mi amigo vino de Bs.Aires y era primera vez en Santiago así es que hice un itinerario y durante el día lo hice que conociera muchas partes que yo creía un turista debía conocer, almorzamos en Tirso de Molina después de una mañana de visitas a Museos, cruzamos la calle porque quería que conociera el mítico "La Piojera" y nunca había tomado "Terremoto" así que no debía irse de Santiago sin probar tan tipico trago nacional.
- Pero que tiene el terremoto Walter?
- Pipeño que es como un vino blanco de muy baja calidad, helado de piña y granadina aunque el verdadero es con Fernet
- Bueno veremos que tal... Dame un segundo que me escribe un amigo
- Pediré los terremoto mientras - le digo mientras me acerco a la barra
En el fervor de manos estirando los billetes avidos por un terremoto noto que Fede se acerca.
- Oye Walter estaba hablando con un amigo que hace clases en la Universidad donde trabajo y quería venir a Santiago antes de empesar, te importa que venga?
- No pa´naa! Mejor, así somos para carretear jajaja y Cuando viene?
- Mañana toma el vuelo, quiere aprovechar de conocer Chile antes de que empiece de lleno en la Universidad de Buenos Aires.
- Toma tu terremoto, es rico pero con uno basta o sino morirás!
Esa conversación en tal típico Bar-Restaurant de mi país fue el comienzo de un viaje lleno de emociones y amor (del bueno) pero también a la vez desesperación por lo inestable, el que viene y estar atado de manos con varios kilómetros de distancia
