Desde ese entonces hasta hoy la canción ha sido un éxito y la rotan constantemente en la radios. Triple platino en Italia y Estados Unidos, Doble platino en Suecia, Nueva Zelanda y así un suma y sigue, terminando con la nominación al pasado Grammy y su presentación en vivo junto a Annie Lennox.
Eso bastó para que el Dios LaChapelle tomara la canción y la re-interpretara con el bailarin Sergei Polunin, ganador de innumerables premios y primer bailarín de tres ballets (uno en Inglaterra y dos en Rusia). nada mas que explicar, solo disfrutar de esta pequeña obra maestra.